domingo, 15 de diciembre de 2013

Capones de pata azul

La raza de capones Prat,conocida popularmente como "pota blava",es autóctona de la comarca barcelonesa del Baix Llobregat.Su plumaje parece diseñado por el mismísimo Alexander Mc Queen,plumas de color verde con reflejos metálicos entrecruzados con tonos coral  para ellos (los gallos) y oscuras para ellas (las gallinas),ambos están calzados con unos zapatos (patas) de color azul pizarra.Su cresta la adornan con con un color rojo intenso,rematada por la negrura de su pico.Su plumaje prêt-á-porter alterna otros matices,pero eso lo contaré otro día.Suelen pasear en parcelas con un máximo de ocho capones por metro cuadrado,lo que les proporciona una carne fina,melosa y sin grasa excesiva.
Hay infinidad de recetas para los capones navideños,unas,con sofisticados rellenos a base de salchichas frescas,ciruelas,orejones,piñones,trufa,canela,pasas,etc.y otras con estrambóticas guarniciones.
Para unos capones de diseño como los de Prat,creo que la sencillez es el éxito en la cocina.Una vez limpio,se introduce en el horno precalentado a 180 grados,salado y embadurnado con manteca de cerdo y el zumo de un limón.Cuando lo tengamos bronceado se incorporan las patatas de base,cortadas en láminas y lo rehogamos con una copa de brandy, de vez en cuando lo sacamos del horno y se le vuelve a duchar con su propio jugo.Una vez que las patatas las tengamos asadas,lo sacamos del horno,se le deja recuperar del susto unos diez minutos,pero siempre boca abajo para que los jugos vuelvan a las pechugas.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Poquer de ases


Para romper con la monotonía del sota,caballo y rey en los turrones navideños,cuatro maestros turroneros,están comercializando unos turrones con un poco más de gracia y con unos ingredientes que aportan un toque de originalidad y de creatividad.
En la localidad lleidatana de Agramunt,Torrons Vicens ha creado una especie de joint venture entre su maestro turronero,Angel Velasco y el cocinero Albert Adriá (que no Ferran) y han elaborado turrón de frambuesa,de piña colada (mazapán de coco al ron,con gelatina de piña),pisada lunar (trufa de romero con crujiente de avellana y frambuesa) y de raíces (trufa de toffe y mazapán de yuzú).
A unos 150 kilómetros de Agramunt,el maestro barcelonés Christian Escriba,famoso por sus grandes pasteles,como el que le regalo a Ferran Adriá en su última cena en el Bulli y que era un enorme pastel de bulldog,está elaborando unos turrones con forma de árbol de Navidad,que no tienen desperdicio.
En Alicante,el gran Paco Torreblanca,además de los clásicos turrones de caviar de chocolate,
crujientes de limón,etc,ha formado tanden con los de ron Barceló para crear una tableta cuadrada a guisa de azulejo que le llaman ron turrón,con aromas y sabores tropicales y elaborados con ron,chocolate,nata,avellanas y miel.
Por último, un mítico de la pastelería vasca,el tolosarra Gorrotxategui,ha creado el turrón "mil y una noches",con cacao de Venezuela,frutas naturales,frutos secos y pétalos de rosas de la mismísima Alejandría,completando así a sus tradicionales trufa al armagnac y ciruelas,trufa de canela,trufa de yogur con frambuesa y de melocotón con chocolate.

jueves, 17 de octubre de 2013

El ángel del Señor anunció a María




El próximo día 14 de noviembre,se celebra en el salón delle Maschere del castillo de Grinzame,la subasta mundial de la trufa blanca de Alba.Cómo cada año participan vía internet las principales capitales del mundo,París,Hong Kong,Moscú,Londres,Munich,Tokio,Nueva York,Madrid,etc.y todo lo recaudado en la subasta,que no es moco de pavo,se destina para becas y para instituciones benéficas.Es el gran día de la trufa blanca.
De nombre -tuber magnatum pico-se localiza durante los meses de octubre hasta enero en la zona italiana del Píamonte y en la península croata de Istria.Es de color ocre pardo,lisa y suavemente aterciopelada,su interior es de un color más oscuro y veteado de blanco.
Desgraciadamente su producción es muy escasa ,a pesar de la multitud de intentos para cultivarlas por parte de científicos,botánicos y agrónomos y, la temporada de recolección muy corta.Todo ello,junto a su aroma asombroso,mágico y prodigioso,hacen que su precio sea desorbitado,(entre 4.000 y 8.000 € el Kg.),vamos,una ganga ¡¡¡.
En la cocina no se aconseja cocinarla,porque perdería todo su aroma y arruinaríamos la trufa.Una forma de rentabilizar la inversión es introducir la trufa en una caja (que no sea Caixabank,Caja Madrid,ni ninguna de esas ) y acompañada de unos huevos de cáscara blanca,que dicen que existen,dejarlos encerrados durante un par de días.Los huevos al tener una cáscara porosa,se impregnan de todo el aroma de la trufa y al freírlos el resultado es  estelar y si para colmo le incorporamos unas laminas ralladas de  trufa escucharemos el Ángelus,palabrita del niño Jesús.